Anzoátegui

con Micky

No sólo esta mañana

sino antes también, otras mañanas,

me desperte diciendo

no escribo más.

Todo

lo he escrito ya

y no encuentro sentido

en seguir llenando los bolsillos

de papeles

con versos, ocurrencias, llantos,

poemas, frases de colores.

Sin embargo, ya no me engaño; sé

que esta pretensión dura poco, un rato,

hasta que subo al tren que va a mi pueblo,

o me abrazo con algún amigo de hace mucho,

o pasa una bella muchacha

a la que nada puedo ofrecerle

más que una mirada y un pensamiento inútil.

Es entonces

cuando busco vorazmente

el papel que arrugué, la contratapa de un libro

algo

donde poder volcar

esta irrefrenable pasión

por no estar del todo solo,

esta sensación de acompañarme con palabras

-parecida a la de hablar

delante de un espejo, pero menos fugaz-

Despúes viene la gente

y dice cosas sobre mis palabras,

interpreta lo que escribí,

descubre lo que hace tanto tiempo

trato de descubrir,

encuentra luces

donde sólo veo tinieblas,

y explica con aplomo y serenidad

lo que me trato de explicar desde que empecé

a guardar papeles

en los bolsillos de mi corazón.

Ignacio Anzoátegui.. no es muy conocido-creo, tal vez sí-, para mí representa mis raíces, el poeta que unió a mis ancestros aún después de la muerte.. si quieren saber más sobre él.. les presto el libro porque lamentablemente no encontré nada en la Web. Aunque averigüé cosas Muy Interesantes (sabían que hay un pueblo homónimo y un dictador también??)