domingo, 5 de noviembre de 2006

llueve de nuevo

Llueve.
Como le dije a Marti es algo lindo, romántico y bohemio.
Y a la vez soberanamente cortamambo.
Un domingo con gusto a nostalgia, fin y comienzo, a soledad e incomprensión.
Con gusto a Adolescencia.
Asquerosa y repugnante, indecente e inútil Adolescencia.
Quiero volar, pero el agua mojaría mis plumas.
Traté de juntar unas gotas para mi frágil espejo pero, como a Oliverio, se derrumbó con todo lo que tenía dentro.
Quiero estar sola y con Vos. Que a veces es lo mismo y casi siempre no.
Quiero poder cerrar los ojos sin lluvia, sin el aire a mi alrededor: sólo tus ojos.
Pero no puedo.
Y tal vez la lluvia no tiene la culpa.
Es tan fácil y despreocupado, culpar a gotas de agua!

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